jueves, 20 de marzo de 2008

Un jueves de poesía, anticipando el otoño...

Hoy es Jueves Santo, para los que profesan la fe cristiana. Es jueves, como tantos otros, pero al despertarme hoy decidí que iba a ser un día especial ( se puede hacer, arbitrariamente, si uno así lo quiere). Mucho tuvo que ver, también, con mi buen humor, el hecho de que mañana ya inicia mi estación favorita del año y que se conmemora el día mundial de la Poesía.

Elegí dos poemas para compartir en este post: el célebre poema "Piedra negra sobre una piedra blanca" del genial poeta César Vallejo, y uno de Octavio Paz titulado "Otoño".


"Piedra negra sobre una piedra blanca" (César Vallejo)



Me moriré en París con aguacero,
un día del cual tengo ya el recuerdo.
Me moriré en París -y no me corro-
tal vez un jueves, como es hoy, de otoño.

Jueves será, porque hoy, jueves, que proso
estos versos, los húmeros me he puesto
a la mala y, jamás como hoy, me he vuelto,
con todo mi camino, a verme solo.

César Vallejo ha muerto, le pegaban
todos sin que él les haga nada;
le daban duro con un palo y duro

también con una soga; son testigos
los días jueves y los huesos húmeros,
la soledad, la lluvia, los caminos...



"Otoño" (Octavio Paz)


En llamas, en otoños, incendiados,
arde a veces mi corazón,
puro y solo. El viento lo despierta,
toca su centro y lo suspende
en luz que sonríe para nadie:
¡cuánta belleza suelta!

Busco unas manos,
una presencia, un cuerpo,
lo que rompe los muros
y hace nacer las formas embriagadas,
un roce, un son, un giro, un ala apenas;
busco dentro de mí,
huesos, violines intocados,
vértebras delicadas y sombrías,
labios que sueñan labios,
manos que sueñan pájaros...

Y algo que no se sabe y dice "nunca"
cae del cielo,
de ti, mi Dios y mi adversario.





4 comentarios:

Anónimo dijo...

No son dos poetas que me gusten especialmente...

Quizás conozca algo más la obra de Vallejo, pero nada, poemas sueltos.

Dicen que este poema de moriré un jueves de aguacero se hizo una realidad profética, ya que murió un jueves de otoño lluvioso en las calles de Paris, lejos de su amado y querido Perú.

Saludos y titosss!

Anónimo dijo...

¡Qué triste!

¿Verdad?

Un sólo comentario...

¿Para esto escribimos un blog?

No nos quieren...

Saludos.

Pasaba a darme algo de publicidad del blog.

Veronika dijo...

Hola ladrón de versos! Gracias por tu comentario.
En realidad no me parece triste, quizás porque tuve algo de feedback aún cuando no aparecieron comentarios.
A veces las opiniones sólo quedan en nuestras cabezas, y no me parece mal. Cada uno con lo suyo.
Un beso!

Eddie dijo...

bueno solo para corregir al ladron_de_versos, cesar vallejo murio en paris, pero no un jueves.¨

¿profetico?

a leer un poco mas y no creer lo que cualquier loco dice.

Saludos.